El gobierno de Estados Unidos impuso este lunes nuevas restricciones a los visados de funcionarios venezolanos que considera han participado en violaciones a los derechos humanos y en actos de corrupción pública.
La portavoz del Departamento de Estado, Jen Psaki, se negó a identificar públicamente a los implicados por leyes de confidencialidad de Estados Unidos.
"Las restricciones también afectarán a los familiares inmediatos de algunos de estos individuos sujetos a restricciones de visa por supuesta participación en abusos de derechos humanos o actos de corrupción pública", dijo Psaki.
"Estamos enviando un mensaje claro de que los abusadores de derechos humanos, quienes se benefician de la corrupción pública, y sus familiares no son bienvenidos en Estados Unidos".
Estas sanciones extienden las que el gobierno estadounidense impuso el año pasado a funcionarios supuestamente vinculados con la represión de las protestas en Venezuela del primer semestre de 2014, que dejaron un saldo oficial de al menos 42 muertos y cientos de heridos.
Según explica el corresponsal de BBC Mundo en Washington, Thomas Sparrow, el anuncio de nuevas sanciones se produce pocas horas después de que el gobierno de Estados Unidos rechazara unas acusaciones del presidente venezolano, Nicolás Maduro, según las cuales la Casa Blanca está tratando de derrocarlo.
Tanto el Departamento de Estado como la Oficina del Vicepresidente le dijeron a BBC Mundo que consideran "falsas" las acusaciones de Maduro, realizadas el domingo en cadena nacional.
La situación en Venezuela
Por su parte, el corresponsal de BBC Mundo en Venezuela, Daniel Pardo, explica que después de las sanciones impuestas a finales del año pasado, éstas llegan cuando la gente está más preocupada por conseguir alimentos que por otra cosa.
"En parte por la crisis económica, la popularidad de Maduro ahora esta más baja que en cualquier momento del gobierno de Chávez, y aunque las sanciones le afectan para la reputación internacional, internamente pueden ser una forma de reunificar al chavismo en torno a un enemigo común y externo, al cual, además, culpan de la escasez, la inflación y las colas", agrega Pardo.
El domingo, Maduro dijo que el vicepresidente Joe Biden les expresó a mandatarios y primeros ministros de países latinoamericanos y del Caribe que el gobierno venezolano sería derrocado.
Así, el presidente venezolano reafirmó los señalamientos hechos el viernes de que su gobierno es blanco de una campaña internacional en la que supuestamente están involucradas varias agencias estadounidenses.
BBC Mundo